Las demandas psicológicas iniciales
En mi trabajo, son múltiples y diversas las demandas que los clientes me realizan. Cuando acuden a terapia, la mayoría de ellos vienen confundidos y desorientados, muy preocupados por no poder encontrar solución a sus dificultades.
Demanda psicológica
Voy a ejemplificar algunos casos que he visto, que se solucionaron con terapia y/o medicación, para que así podáis ver la variedad de consecuencias y síntomas de diversas enfermedades psiquiátricas o malestares psicológicos. En los siguientes ejemplos, expondré un breve resumen del motivo inicial de demanda en la primera sesión:
*Nota: todos los casos aquí expuestos tienen datos personales inventados para no atentar contra la intimidad de nadie.
- Chico de 24 años de edad, licenciado en Derecho, soltero. Comenta que hace unos 2 años besó a una chica, no sintió nada y se asustó. Desde entonces, experimenta incapacidad para sentir amor. Presenta pensamientos obsesivos de preocupación continua, relacionados con el enamoramiento, la pareja y el sexo. Tiene miedo de acercarse de forma amorosa a cualquier chica por si no siente nada.
- Chico de 31 años de edad, licenciado en Económicas, con pareja. Desde hace más de diez años sufre fuertes dolores y pinchazos en los intestinos. Le han hecho todo tipo de pruebas y le han descartado cualquier clase de enfermedad orgánica. Le diagnostican colon irritable y lo derivan al psiquiatra.
- Chico de 37 años de edad, Informático, con pareja desde hace 3 años. Manifiesta inapetencia sexual a partir de los tres meses de la relación con la pareja actual. Siente que quiere mucho a su novia, pero se describe como una persona con poca líbido y sin demasiado interés por el sexo. Cuando era joven no le sucedía.
- Chica de 32 años de edad, estudios de Diseño gráfico, casada. Acude a terapia porque tiene miedo a hablar en público. Nunca le ha gustado hacerlo, pero desde que ha empezado su nuevo trabajo ha ido desarrollando fobia a realizar presentaciones. Incluso, le está costando hablar con sus superiores y compañeros de trabajo.
- Mujer de 45 años de edad, administrativa, divorciada, con dos hijos. Desde su divorcio 3 años atrás, se siente más irritable y ansiosa. Ha empezado a tener problemas en el trabajo por sus malas contestaciones. Muchas veces, paga su mal humor con sus hijos. No sabe cómo pararlo.
- Chico de 28 años de edad, FP, soltero. Aunque siempre ha sido algo tímido, desde hace unos años atrás y de forma progresiva, experimenta dificultad para relacionarse con los demás. Muchas veces está demasiado pendiente de lo que dicen los otros. Cada vez le cuesta más hablar con otras personas, incluso con amigos, pues tiene miedo de que se enfaden con él, meter la pata o de hacer el ridículo.
- Mujer de 56 años de edad, ama de casa, estudios primarios, casada con tres hijos mayores de edad. Se siente decaída y con falta de autoestima. La relación con su pareja siempre ha sido conflictiva, pero desde que sus hijos se independizaron y se fueron de casa, la relación con su marido se ha deteriorado. Muestra un grado elevado de devaluación de su autoconcepto a través de sentimientos de inutilidad, culpabilidad, inseguridad y auto castigo.
- Mujer de 41 años de edad, licenciada en Periodismo, casada y con una hija de 8 años. Actualmente desocupada. Se siente vacía y desorientada, sin objetivos vitales. Antes de tener a su hija, estaba muy centrada en su carrera profesional, de hecho, dedicaba la mayor parte de su tiempo al trabajo. Cuando nació su hija, tuvo que dejar de trabajar por el grado de exigencia de su trabajo y para dedicarse a la niña.
- Hombre de 38 años de edad, licenciado en Ingeniería industrial, con pareja, sin hijos. Relata sentirse enamorado de su pareja pero dice no poder contener el impulso de interesarse por otras mujeres. Ha tenido diversas aventuras fuera de la relación. Cada vez se siente más culpable, aunque no sabe cómo hacer para parar de ser infiel ni mentir. Relata que en su adolescencia y principios de la edad adulta tuvo relaciones muy conflictivas con mujeres. Padres muy autoritarios, rígidos y controladores.
- Chica de 31 años de edad, licenciada en Farmacia, soltera. Hija única, padres farmacéuticos, muy volcados en el negocio familiar. Desapegados emocionalmente de su hija. Ella reconoce sentirse excesivamente dependiente de los hombres. No sabe gestionar las relaciones de pareja. Se siente muy decepcionada con el amor, cree que los hombres sólo la utilizan. Cuando empieza una relación con alguien, rápidamente lo da todo, se vuelca totalmente en el otro.
Estos son sólo unos pocos ejemplos de distimia y otros trastornos leves de ansiedad y trastornos del estado de ánimo, juntamente con otros de dificultades psicológicas variadas. Si os sentís identificados con alguno de estos casos o creéis que podéis encajar en este perfil, no dudéis en pedir ayuda. Cuando antes pongáis solución, antes estaréis mejor.
Helena Romeu Llabrés
Psicóloga clínica
Licenciatura en Psicología, Universitat Oberta de Catalunya.
Título de experto en Terapia Cognitiva, Universitat Ramon Llull.
Formación específica en Hipnosis Clínica, Gabinet mèdic i psicològic Dr. Romeu.
Licenciatura en Ciencias de la Información, Publicidad y RRPP, Universitat Ramon Llull.