Eyaculación precoz: ¿qué puedo hacer?
Qué es la eyaculación precoz
Contenido
La eyaculación precoz es un trastorno de tipo sexual caracterizado por una eyaculación sin control y prematura, que habitualmente se produce con una mínima estimulación sexual, imposibilitando o dificultando seguir con el coito para satisfacerse a sí mismo y/o a la pareja.
Tipos de eyaculación precoz
La eyaculación precoz puede ser de tipo primario y secundario.
- Eyaculación precoz primaria: La persona la ha padecido a lo largo de su vida, sin nunca haber tenido un adecuado control eyaculatorio.
- Eyaculación precoz secundaria: Aparece en un momento de la vida de la persona (cuando antes no había ocurrido), y puede haber sido causada por algún aspecto médico, como por ejemplo una infección en los conductos del esperma o también puede aparecer como consecuencia de algún suceso traumático de tipo psicológico.
¿Tengo eyaculación precoz?
Para saber si uno tiene eyaculación precoz podemos valorar los siguientes síntomas:
- Se produce sin control, antes de lo que uno mismo quiere o su pareja desea.
- Habitualmente, ocurre antes de la penetración.
- En el caso de que se pueda iniciar la penetración, la eyaculación se produce inmediatamente después de ésta.
- Para valorar de qué tipo de eyaculación precoz estamos hablando, pensemos en si siempre se ha eyaculado con esta sintomatología (primaria) o es un cambio súbito en su comportamiento sexual (secundaria)
¿Qué es el reflejo eyaculatorio?
El reflejo eyaculatorio se produce por una saturación de órdenes de estimulación sexual en una zona concreta del cerebro, concretamente por neurotransmisores, siendo uno de los principales la serotonina. Cuando los neurotransmisores actúan cumpliendo su función de saturación producen un reflejo para que el cuerpo produzca la eyaculación desde los testículos pasando por la próstata, la uretra y en último término, por los conductos seminíferos.
Por lo tanto, el reflejo eyaculatorio está relacionado con el cerebro, el sistema nervioso central y los neurotransmisores (serotonina). Al mismo tiempo, también tiene que ver con el correcto funcionamiento de los conductos, desde los testículos a la uretra (no tiene que haber infecciones)
¿Cómo se soluciona la eyaculación precoz?
Cuando la eyaculación precoz es de tipo psicológico debemos pensar (en primer término) en dos tipos de posibles soluciones:
- Teniendo en cuenta que el reflejo eyaculatorio está relacionado con la saturación de serotonina en un circuito concreto del cerebro, una opción posible es tomar medicamentos que ralenticen esta saturación. Estos medicamentos deben ser prescritos por un médico y pueden solucionar el problema, aunque no en todos los casos. Aún así, como son medicamentos bastante inofensivos, si el médico lo considera, es una buena opción a probar. Estoy hablando de los ISRS (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina).
- En segundo término, se puede realizar un trabajo psicológico de tipo sexual para reaprender a eyacular. Cuando la eyaculación precoz es de tipo primario (se ha producido siempre), lo que sucede es que la persona ha aprendido de forma incorrecta a eyacular. En este caso, se pueden realizar una serie de ejercicios para educar sexualmente al paciente. Por ejemplo, practicar la masturbación sin llegar a la eyaculación. Con la práctica, la persona puede aprender a controlar de forma voluntaria el reflejo eyaculatorio.
- Cuando la eyaculación precoz ha sido causada por un trauma (por ejemplo que en un acto sexual, la persona haya eyaculado de forma precoz y se haya asustado pensando que quizás esto le pasará en siguientes ocasiones), tenemos que realizar ejercicios para aprender a reducir la ansiedad de anticipación que, en el fondo, es la causante de que la eyaculación se acelere. Primero de todo, es muy importante normalizar la situación. Personalmente, acostumbro a aconsejar que la persona sea franca con su pareja estable o pareja puntual. Esto ayuda a rebajar las expectativas y a reducir el miedo a eyacular de forma precoz. Al mismo tiempo, también se iniciarán una serie de ejercicios sexuales con la pareja en los cuales se podrá disfrutar de caricias, masajes y tocamientos pero, en ningún caso, de penetración. De esta manera, eliminamos la ansiedad de anticipación causada por el pensamiento de si eyacularemos precozmente o no.
Acudir a un profesional
En general, he simplificado bastante el tratamiento a realizar en estos casos. En algunas ocasiones, también puede ser necesaria terapia psicológica pues puede ser que la persona tenga baja autoestima, dificultades relacionales con las mujeres (u hombres), o malas experiencias traumáticas.
Lo más aconsejable si se tiene este tipo de dificultad, es acudir a un profesional. En la mayoría de los casos, si el médico, psicólogo o sexólogo sabe lo que se hace, la eyaculación precoz tiene fácil solución.
Helena Romeu Llabrés
Psicóloga clínica
Licenciatura en Psicología, Universitat Oberta de Catalunya.
Título de experto en Terapia Cognitiva, Universitat Ramon Llull.
Formación específica en Hipnosis Clínica, Gabinet mèdic i psicològic Dr. Romeu.
Licenciatura en Ciencias de la Información, Publicidad y RRPP, Universitat Ramon Llull.